El Hombre Lobo (1941)



Muy pocas personas conocen que el interés popular por el cine comenzó con la época de los Monstruos de Universal PicturesCarl Laemmle Jr. descubrió el impacto que tenía en la época proyectar las antiguas historias y libros del viejo continente gracias a trabajadores del extranjero.
Todos conocemos a Drácula, Frankenstein, la Momia o El Hombre Invisible como los monstruos originales que conmocionaron al público de los años 30, aunque en 1935 los hombres lobos tuvieron una oportunidad.
Pasaron desapercibidamente debido a la mediocre película Werewolf of London, pero más tarde tuvieron su oportunidad de convertirse en otra película del género con El Hombre Lobo o The Wolf Man.



Este verano he tenido la oportunidad de ver cada película de estos personajes de Universal en un pack que me regalaron por mi cumpleaños, y aunque pertenezca a una época muy distinta del cine actual, siento que hay algo interesante en hablar del auténtico género de terror y de sus más populares personajes.
Esta es la historia de The Wolf Man:

Nuestro protagonista Larry Talbot (Lon Chaney Jr.) vuelve a Gales después de una larga ausencia con la intención de reconciliarse con su padre el señor John Talbot (Claude Rains) tras la muerte inesperada del hermano de Larry; comenzando ambos a renovar lazos con la construcción de un telescopio de su padre. Sir John impresionado por los nuevos conocimientos de su hijo tiene la intención de hacer que Larry ocupe su puesto en el castillo y se encargue del nombre familiar en adelante.
Pero Larry ocupa su mente en otras cosas, por accidente al echar un vistazo en el reciente telescopio, el objetivo apuntaba a la ventana de una hermosa joven que lleva el anticuario del pueblo.
Decidido a pasar por la tienda, Larry tiene la oportunidad de conocer a Gwen Conliffe (Evelyn Ankers) ademas del curioso grabado de un bastón de plata con una empuñadura de lobo; Gwen le explica que el lobo y la estrella de 5 puntas está relacionado con la leyenda del hombre lobo, una fábula muy conocida por el lugar.
Larry le pide que le cuente algo más sobre el tema en una cita y aunque Gwen declina a pesar de estar prometida, acaba accediendo a ir con Larry junto con su amiga Jenny (Fay Helm).
Las chicas acompañan a Larry a ver a una familia de zíngaros que son capaces de ver el destino, mientras Jenny es atendida por Bela (Bela Lugosi) y Maleva (Maria Ouspenskaya) Larry y Gwen se alejan y hablan de la posibilidad de salir juntos y de la historia del hombre lobo.
La noche se torna oscura, y la niebla se expande en un grito de socorro que proviene de Jenny.
Larry corre a su auxilio, pero a la mañana siguiente descubre que Jenny ha muerto y que Bela estaba con ellos, corriendo el rumor de que Larry provocó la muerte de estas dos personas, a pesar de declarar que fue un enorme lobo quien saltó a por Jenny y que le dejó una cicatriz de la que ya no queda ni un rastro, cuestionando así no solo la inocencia de Larry, sino también su cordura.



Por alguna razón está película no es considerada una obra del cine como fueron sus predecesoras, al parecer lo único que la hace entretenida y reconocida es por la idea proyectada del licántropo junto con el impacto que supuso ante el público de los años '40.
En otras palabras, los conocidos en el cine alaban Dracula, El Doctor Frankenstein, El Hombre Invisible y La Momia, pero ésta queda como un hijastro en el Día de Acción de Gracias, totalmente fuera de la mesa, al menos en ese momento, ya que con los años (desde los '80) gracias a la popularidad del personaje como de la leyenda se recuperó el interés de nuevo por este clásico.


Creo que no engañaré a nadie negándolo, pero de todas las películas clásicas, esta es mi preferida por varias razones a saber:

La atmósfera en la película es innovadora para sus años; comienza como algo acogedor, el retorno de un hijo a su casa, el entusiasmo y la alegría se nota en el propio escenario del castillo, como en el pueblo o en las ferias de los zíngaros, haciendo el sentimiento contagioso con nuestros protagonistas, y cuando toca girar la moneda lo hacen con un tacto que parece chocar con las aptitudes del teatro, es decir, las actuaciones de arrepentimiento, compasión y convalecencia se vuelven demasiados reales y denotan en una gran actuación. 

Lon Chaney Jr. Claude Reins, y el jefe de policia Paul Montford interpretado por Ralph Bellamy

¿Mi ejemplo? Tratad de ver la primera escena entre Larry y su padre, ambos conversan con cariño sobre los progresos de Larry en EEUU, y de repente se ve un cuadro del que suponemos que era el hermano fallecido, Larry lo observa con tristeza y con una mezcla de sinceridad y congoja expresa su pésame por él. Es una escena muy breve pero es solo una pequeña prueba de la complejidad que presenta el personaje, y de como su maldición convierte esta historia en una tragedia.
Pero es más bien favorecida por la actuación de uno de los actores más versátiles, quien resulta ser el hijo del hombre de las mil caras.

Lon Chaney Jr. es perfecto como Larry Talbot, un personaje bondadoso y frágil es interpretado en una actuación generosa e histérica cuando la trama lo necesita.
Chaney trabaja en cada escena con mucho esfuerzo, ya que tenemos que verle en muchas tomas felizmente con su padre, con Gwen defendiéndola, y a si mismo confuso por la muerte de Jenny y por la posibilidad de que Bela muriese por su culpa, siendo rechazado por el pueblo, y como no, nervioso y con ira por el tema del hombre lobo; y eso sin hablar de su interpretación del monstruo en sí.



Creo que la razón de que el personaje encaje tan bien es por la tragedia que le rodea en la historia, ya que vemos un personaje que intenta rehacer de nuevo su vida en su hogar, enamorado de lo que parece ser por primera vez en su vida, y con la amistad de su padre ya ganada.
Pero los hechos que desembocan en la noche lo llevan a la locura y a la culpabilidad de las muertes que ha intentado evitar. Verle con la tristeza y el deseo de fugarse de nuevo te hace sentir lástima por él, realmente lo hace.
Esto hace al personaje más entregado y con una mayor conexión desde Jack Griffin, ya que Dracula es solo un ser inmortal que nos ataca bajo su crueldad, el Monstruo de Frankenstein aunque podamos sentir pena por los hechos que ocurren a su alrededor, sigue implicado en un deseo de muerte tanto consciente como inconscientemente. 
Imhotep cae de nuevo en el tema de Dracula, su deseo de resucitar a su amada tan solo lleva a una muerte fría de varios personajes, incluso ya consciente la mujer que le quiso no desea estar con él y aún así intenta matarla.

Larry es distinto, no es consciente de la leyenda e intenta hacer todo lo posible por proteger a sus seres queridos atándose en una silla, y como vemos en sus secuelas, suicidándose.
La historia es trágica, al igual que su personaje y su actor al proyectarlo, quien demuestra un gran control en una actuación de sobresaliente.


Claro está que esta historia no solo pertenece al Hombre Lobo, esta tragedia de horror les corresponde también a los otros afectados como a Gwen, Jenny, nuestros amigos zíngaros, y el pueblo en sí, junto con Sir John Talbot en cabeza.

El interes romántico en esta película es en mi opinión el mejor desde La Momia, todo se debe a las diferencias que el personaje tiene con las otras sin dudarlo.
Gwen es interpretada por Evelyn Ankers, no tiene mucho de especial su actuación pero se nota que antes trabajó en otros proyectos, su experiencia evita la característica actuación de las otras actrices de Universal, muy anestésica, sin sentimiento y totalmente lamentable, pero creo que eso se debe también a sus personajes.
Gwen es algo más fuerte que Larry ante las trivialidades que pasan, ella aguanta las puñaladas de las "cotillas" de pueblo (a quien insultan en su propia casa, triste) y está el factor de que se va a casar con un hombre problemático que no expresa su amor tampoco, por no hablar de lo insufrible que es cuando está celoso.



Por eso es interesante ver el control que muestra Evelyn con las decisiones que toma en cada momento, junto con cómo se acerca a Larry a pesar de todo, hay mucha inteligencia en su personaje.
Atractiva, fuertemente segura, pero también un ser humano, Gwen es en mi opinión una de las mejores mujeres de este género de terror de Universal por las diferencias que establece con sus torpes e inexpresivas predecesoras, junto con el hecho también de como se adapta ante la leyenda del hombre lobo.

Gwen con su celoso prometido

Hablando de la leyenda; la película inteligentemente está más centrada en la historia de la licantropía como de narrar el poder de la sugestión que también se crea con los años, siendo está la historia más exacta a la mitología, y la primera película en no basarse de un libro como de una base real.

La leyenda llega a la película con nuestros queridos zíngaros, específicamente con el afamado actor Bela Lugosi quien abrió el éxito de los monstruos clásicos con su interpretación del conde Drácula; y ahora está aquí para comenzar otra.

Debo de admitir que la historia de Lugosi siempre me ha encantado, junto con sus actuaciones en los proyectos que ha rodado (Sí, incluso con Ed Wood, llamadme loco), pero hasta yo, un fan de este hombre, debo admitir que aquí no hay mucho que hacer.
Bela Lugosi solo es Bela, el hombre lobo original con apenas 5 lineas de guión, cierto que su voz preocupada deja huella en la película, al igual que su famosa mirada que lo convirtió en un éxito, aquí mezclada con temor es algo que destaca.
Pero lamentablemente, esta es solo una actuación normal de Bela de la que no hay mucho que sacar, y no le culpo, esta rodeado de grandes actores que han aprendido de sus pasos; y de todos los actores, el no es el zíngaro en el que mis ojos están puestos.



Maria Ouspenkaya es la madre de Bela, Maleva, un personaje que comprende la naturaleza del licántropo debido al tiempo que ha pasado viendo como su hijo se consumía en esa maldición.
El personaje está lleno de tristeza en muchas escenas (aunque la cara de Maria es también pura amargura) y comparte también consuelo con la situación que ahora Larry debe lidiar.
Maleva está retratada con bastante profesionalidad, aunque su actuación siga estando limitada por el guión, ya que no la vemos compartiendo tiempo con Bela o su reacción ante el cadáver.
Creo que la razón de que me guste es por el parecido que tiene con Tanya en Sed de Mal, interpretada por Marlene Dietrich, ya que comparten el aura de misterio y esa posición elevada que da a entender que conocen el futuro y las consecuencias de lo que sucederá, al igual de que son el consuelo en esos mundos de peligro y tragedia.
El magnetismo de sus actuaciones son brillantes, y realmente la frase o conjuro que realiza para revertir la transformación está sorprendentemente bien escrita y narrada:

"Caminaste por un sendero de espinas, pero no fue culpa tuya. Así como la lluvia empapa la tierra, y el río muere sin remedio en el mar, así camina el hombre hacia su fin predestinado, tus sufrimientos han terminado. Ahora descansa en paz"



Entre otras cosas, la película destaca como ya dije de la atmósfera que se proyecta, en este caso quiero hablaros de algo muy común en las películas de este tipo, el ambiente que recrean.
Castillos, pueblos apartados de la vista, y como no, oscuros bosques son los típicos escenarios en los proyectos de los monstruos, y ésta, aunque no sea aparte de la idea de siempre, se reta a innovar y a mejorar ese aspecto.
El Hombre Lobo tiende a volver al mismo escenario del bosque una y otra vez, apareciendo obviamente en el mismo sitio en cada toma, pero aprovechan las distancias camuflándola con la impresionante niebla y caravanas de los zíngaros, junto con un discreto trabajo de cámara que maneja la aparición de nuestro monstruo lentamente y con desdén.



Ciertos ambientes como la iglesia y el velatorio de Bela añaden la tensión que necesitan nuestros personajes y actores para mantener el aura de tristeza en el que están.
La escena de Larry evadiendo la capilla es sorprendentemente fuerte y afectiva, ver como el arrepentimiento y la culpa le dividen del resto, e incluso del perdón del pueblo, resulta algo triste verdaderamente.
En cuanto al velatorio, una vez más la actriz de Maleva está detrás de todo esto, un sitio oscuro y frío que ataca al corazón de Larry al ver como su madre se despide de su hijo por su culpa, sigue sintiéndose culpable a pesar de haber intentado salvar a Jenny.
Así es como la ambientación junto con la iluminación y los efectos del maquillaje trabajan en la película, algo PERFECTO ya cuando se nos revela a nuestro licántropo.
Y hablando de eso:



No puedo dejar esta entrada por terminada sin hablaros del trabajo del padre de los Monstruos de Universal, el maquillador Jack Pierce.
No era normal en esa época que un hombre se dedicará a maquillar a todo el grupo de actores, pero Jack Pierce fue el primero en estudiar medicina, anatomía e incluso mecánica para aplicárselo a futuros diseños de los monstruos que el mismo creó.
En este caso, la creación del Hombre Lobo también fue un trabajo duro e impresionante para la época, pero no resulta tan reveladora como cuando mostró al Monstruo de Frankenstein, lo cual es considerado como uno de los mejores trabajos de maquillaje en la historia del cine.

Lon Chaney Jr. cansado y furioso con el maquillador Jack Pierce

El proceso de aplicación duraba un total de 6 horas y de 1 en quitarse, consistía en pelo de yak junto con una prótesis de caucho para crear el hocico, la única vez que Jack uso un material que no fue maquillaje para crear al monstruo, peluca, cejas acentuadas, etc.
Mezclas caseras de maquillaje para completar su cara con el pelo eran la especialidad de Jack, la creación de maquillaje no tóxico totalmente aplicable.
El resultado es otra obra que solo Pierce pudo crear con una combinación de su maquillaje original junto con materiales no teatrales; durante el proyecto una de las condiciones que más afectaron al personaje fue la prohibición de una transformación directa ya que sería calificada como "muy bestiales y violentos para el público", así fue como Jack por medio de la técnica del "Stop Motion" tuvo que ponerle en cada toma a Chaney maquillaje, mientras este tenia que permanecer en la misma posición con la cámara encendida, un trabajo totalmente agotador.
Más frecuente en las continuaciones de Larry Talbot, pero por lo que se centran en The Wolf Man, ni siquiera tenemos una transformación completa, más bien es sugerente con la mentalidad de Larry, y no llega a haber tampoco una iluminación de la luna llena en esos momentos; pero sigue siendo una transformación inigualable en esta época.




Terminando con el análisis, hablemos del otro lado de Larry Talbot, del licántropo conocido como el Hombre Lobo o "The Wolf Man" (Eso es porque werewolf puede ser cualquiera, pero como por ejemplo un vampiro no tiene porque ser Dracula).
En sí el monstruo es bastante simple pero lleno de furia y bestialidad contenida; gracias a que la Motion Picture Producers & Directors Association (Más conocida como la MPAA) no nos permite ver una transformación completa de Talbot al igual que posibles ataques bien manejados; visto así no hay mucha exploración del licántropo, pero sí de Larry manejando la situación.
Entonces solo queda verlo correr por la niebla aullando, y como se lleva a la gente a a la esquina de la cámara a matarlo, algo estándar como en las otras películas, no hay mucho de especial sobre el Hombre Lobo más que es Larry Talbot y el maquillaje que mantiene en escena. Pero sigue siendo interesante ver las reacciones de los personajes que hemos seguido durante este tiempo afrontar esta terrible verdad, y a Larry cayendo en la locura y el miedo por quienes lo rodean.



A pesar de todo, es una película que aún tiene cierto valor para verla, en comparación con otras películas clásicas en donde puedes argumentar de la falta de música o de la brevedad de la historia; El Hombre Lobo cumple algo que muy pocas películas hacen, ser atemporal gracias a su profunda historia, sus atormentados personajes, sus torcidos escenarios y la música con la que están siendo acompañados. Gracias a esto, es la más cercana al cine contemporaneo y estructurizado que Hollywood ha mantenido al público general en todo este tiempo.

A día de hoy se puede observar como ha fortalecido la leyenda y la popularidad de los hombres lobos, para bien o para mal, ya sea en trabajos como el maquillaje de Jack Pierce con personajes innecesariamente relacionadas con esta historia.

Nicholas Hoult como Bestia demuestra una avanzada técnica y similaridad en la creación de El Hombre Lobo 

George Waggner crea un importante clásico junto con el guionista Curt Siodmak que recomiendo ver si eres un interesado del cine de terror o de los clásicos que la acompañan.
Es cierto que ya carece de un valor terrorífico, ante esas circunstancias no se la recomendaría a nadie; más bien se puede admirar por los otros rasgos que os he estado comentando.

Si de verdad os interesa ver algo avanzado con el mismo aura os recomiendo el "remake" de 2010 The Wolfman, una versión menos impresionante, pero con interesantes temas y un aura que encaja con la época y la propia leyenda del monstruo.
Está protagonizada por Benicio del Toro y Anthony Hopkins como los Talbots, dos interesantes elecciones que me hacen preguntar en qué llega a superar este nuevo intento de Universal al viejo clásico (tal vez en el futuro hablemos de esta otra historia).



Concluyendo con el análisis, aquí tenéis 2 recomendaciones sobre una leyenda espectacular que está presente en una de las historias más dedicadas con las que hayan trabajado.
Si escogéis la versión de 1941, prepararos para recibir una proyección más honda en la historia, al igual que en sus personajes; si estáis interesados en la de 2010, igualmente recibiréis parte de esta tragedia en personajes menos desarrollados, pero con mayor trabajo en repartir sustos y demás.



En cualquier cosa, no os quedareis decepcionados viendo amabas versiones; en el caso de la original siempre se puede ver en TCM durante octubre, mientras que el remake es fácil de encontrar en cualquier tienda o canal.
¡Ya nos veremos en el próximo análisis!



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