martes, 29 de noviembre de 2016

Una serie de catastróficas desdichas de Lemony Snicket (2004)



¿Sabeis? Me encanta leer, en serio, me encanta sentarme en mi bucata y ponerme a leer cualquier tipo de libro, ya sea historia de España, extensas novelas de misterio, aventura, a Camilo José Cela, Tolkien o Rowling, de arte, cuidados de bonsais, o libros centrados en mi carrera; leer es una actividad de la que no dejo de disfrutar cada vez que cierro un capítulo.

Digo esto porque durante unos años estuve muy interesado en leer las obras de Lemony Snicket (Seudónimo del autor Daniel Handler) "Una serie de catastróficas desdichas", la historia de la familia Baudelaire siempre me ha llamado la atención respecto al misterio que los rodea, junto con las persecuciones que sufren de los asesinos de sus padres.
Ademas de ser personajes agradables e interesantes, así lo es la historia; el problema siempre fue que a pesar de ser libros bastante cortos, son muy difíciles de conseguir, lo que me impulsó a sobrepasar mis límites empezando a leer libros en inglés.

Dicho sea de paso, os recomiendo los tres primeros en caso de que queráis uniros.
Los libros de alguna manera contienen temas y el espíritu que se captó en la referencia más popular que ha habido de ellos.
Me estoy refiriendo a la conocida película de Jim Carrey de 2004; con la noticia del estreno de una serie más centrada en los libros en Netflix, Una serie de catastróficas desdichas merece ser analizado después de ese impresionante trailer que no puedo dejar de admirar.
Empecemos directamente con la historia:




Violet (Emily Browning), Klaus (Liam Aiken) y su hermana pequeña Sunny (Kara y Shelby Hoffman) Baudelaire, son tres niños que han quedado huérfanos tras un incendio que ha arrasado su casa con sus padres dentro tras el retorno de uno de sus viajes.
Sin perspectivas, ni alegrías y muy confusos, el Sr. Poe (Timothy Spall) se hace cargo de llevar a los Baudelaire con quien se trata de su pariente más cercano, el conde Olaf (Jim Carrey) un actorzuelo que se integra en su papel delante de Poe como gran guardián y devoto familiar, pero que en realidad solo tiene la intención de mantenerlos en malas condiciones para quedarse con la fortuna que los niños heredarán con la mayoría de edad.
A pesar de todo, los Baudelaire se tienen entre ellos, y eso es lo único que necesitan. Viendo que la union hará la fuerza con las características que mejor los han definido a todos durante años; la imaginación de Violet a la hora de crear inventos a partir de chatarra o cachivaches, Klaus y su memoria fotográfica junto con su fascinación por la lectura le convierte en una fuente extensa de conocimientos, mientras que Sunny o "La mordedora" tiene dientes de los que es sensato no acercarte.
Juntos conseguirán exponer la actitud de Olaf ante Poe, quien le llevará con sus nuevos y extraños familiares, sus tíos Monty (Billy Connolly) y Josephine (Meryl Streep).
Tras conocerlos llegan a la conclusión de que, o un misterio sobre sus familiares está rodeándolos, o sus padres estaban en lo cierto al nunca presentarlos.
Pero la felicidad durará poco cuando descubran que Olaf nunca se ha rendido por su deseo de llegar a ser rico.



Los créditos de inicio comienzan con una estúpida presentación que parecen parodiar los cortos de inicio de Pixar, para saltar a la introducción de como no, Lemony Snicket; no podía ser una obra suya sin que el seudónimo personaje del autor apareciese en la gran pantalla.
La verdad es que incluir a Snicket como narrador en la película ofrece una forma de contar la historia original con las innovaciones que ofrece el cine y el libro.
Está bajo un halo de misterio y sombra, contándonos en los libros su punto de vista pesimista para abandonar este libro o película, e ir a por una recomendación mejor si no quieres oír la historia de los huérfanos Baudelaire.

Jude Law pone la voz a Snicket, resulta bastante interesante y cautivadora mientras le sigue el sonido de la máquina de escribir, pero especialmente considero más conectado al libro y a su intriga al doblaje en castellano que realizó Armando Carreras, consiguiendo también una voz muy difícil de alejar de esta película como de los libros sus temas y su misterio.
La oportunidad de conectar a Snicket con la trama y el espíritu de la película, ata los puntos con los que se asocia con el libro de una manera perfecta, desde que interrumpe un cliffhanger cuando la "víbora increíblemente mortal" está a punto de atacar a Sunny, hasta que su entorno desvela que este narrador que acecha tumbas y orillas secas, puede que también forme parte de los tristes acontecimientos que observamos.



Comentaremos rápidamente las formas técnicas y la cinematografía, lo que para mí es una de las mejores bazas de la película, porque es preciosa; esta es una de esas películas y escenarios que desearías poder colgar en tu cuarto, al menos en cuanto a un entorno gótico o incluso victoriano viendo la casa de Olaf y la mansión de Monty.
La forma en que aprovechan exagerados escenarios para dar la identidad a la película es perfecta, junto con el contraste de colores que dan en la mansión de Monty como el punto de mayor felicidad de los Baudelaire, hasta contemplar que la falta de ello corresponde a que los acontecimientos empeoran conforme la historia va avanzando, como se ve en el Lago Lacrimógeno, la primera vez que ven su casa incendiada, y durante el clímax en la obra de Olaf.



Cierto que no ayuda que el encargado de crearlos sea precisamente Rick Heinrichs, que junto con Bo Welch han trabajado en muchos otros proyectos con Tim Burton, algo que los críticos y el propio público no dejaron pasar a la hora de criticar al director Brad Silberling diciendo que los resultados son inferiores a los que Burton habría hecho, o que su enfoque en los escenarios y el entorno como el aura que crea no está equilibrado con el resto de los personajes o la historia.
Equilibrar es una palabra perfecta para hablar de los personajes, las actuaciones o la historia; pero para terminar este punto diré solo que las técnicas que utilizan con la cámara, al igual que los escenarios que crean, favorecen mucho a la identidad de la película, al igual que alteran a su beneficio cierta proyección que Snicket narraba. Ahora la gran pantalla debe recoger la experiencia y la visión de ese mundo ante los ojos de los protagonistas, y no ante los del autor como en el libro, algo de lo que se adelanta de sobra la película.



Respecto al argumento como los personajes, los abordaremos enseguida, pero antes debo comentar algo que si no lo hago sé que os molestará a muchos de vosotros.
Para muchos la película guarda curiosamente una similitud respecto a los temas y algunos de los personajes con una de las series más populares de España, "El Internado".
Siendo justos, yo fui fan de la serie, pero más tarde dejé de interesarme al ver como enredaban las historias y jugaban con el público para prolongar la serie con una lista de preguntas que no daban las respuestas que queríamos.

Aún así todo se remonta a que la primera temporada y parte de la segunda, recogen historias, temas de misterio e incluso personajes huérfanos como los Baudelaire, teniendo aquí a Marcos y Paula en la Laguna Negra.
A pesar de sus fallos y falta de argumentos, solo quería comentar que las grandes ideas siempre comparten un punto objetivo; todo empieza con una misteriosa muerte que abre la puerta a muchas conjeturas, peligros y personajes que se relacionan al entorno como buenos o malos, lo que elabora una cadena de catastróficas desdichas y misterios siempre por resolver.
Algo que será muy difícil de verdad, como esta película, ¿las razones? Bueno, enseguida nos pondremos con ellas.



La historia en la película ha sido recogida de los tres primeros relatos de Snicket que fueron publicados como Un mal principioLa habitación de los reptiles (Mi favorito de estos tres) en 1999, y en el 2000 El ventanal.
El guión hace un gran trabajo en condensarlos y ajustar muchas de las escenas para expandir la historia al cine, al igual que respetando parte del material original al proyectarlo; existen cambios desde luego para poder centrar el final en la linea que buscan, el cómo los tratan lo veremos más en adelante.
Aquí el argumento facilmente se centra en la linea de los Baudelaire y con Snicket de narrador; a pesar de eso presenta ciertas inconsistencias que no puedo parar de ver; podríamos defenderlo excusando que eso no pasó en el libro, pero en cierta manera los personajes sí pueden llegar a esa ridícula conclusión que hace que flojeé la trama; así que en cierto modo vuelve a ser una de esas desventajas que caen en la opinión personal.
Dicho esto, ¿por qué me gusta la trama de Una serie de catastróficas desdichas? Por 2 cosas sencillas:

-Una es la oscuridad y el misterio de la historia de los Baudelaire; me encanta como abordaron la duda respecto al incendio, nadie sabe cómo se provoco y por qué los padres de los protagonistas no contaron nunca con un plan para sus hijos en caso de que ellos no estuviesen.
También a medida que vamos avanzando con Klaus, nos damos cuenta de que ciertas cosas parecen estar atadas al pasado de los Baudelaire y al incendio, ya sean los catalejos o el misterioso ojo tatuado en el tobillo de Olaf.
Respecto a la oscuridad de la trama, bueno, los huérfanos deben luchar por sobrevivir contra un pirado que parece sacado de la calle que da a la barbería de Sweeny Todd.
Hay una cruda maldad y miedo muy legítimo en el conde que conecta rápidamente con la vulnerabilidad que sentimos por los niños; al igual que el propio y exagerado personaje llevado por Jim Carrey, que ayuda a traducir y controlar ese ambiente también tan disparatado y retorcido.
Tomad como ejemplo cuando llegan a la casa del tío Monty y Stephano hace aparición, francamente brillante.



-La segunda es sencillamente el cómo los personajes se desenvuelven en la trama.
Muy pocas veces una película consigue mantener todos los personajes interesantes y dedicados en el argumento, pero aquí han conseguido que incluso la hermana de 2 años se convierta en un personaje muy relevante al igual que cómica.
Incluso el villano consigue afrontar en distintas maneras la historia, algo muy difícil de ver y entender; cada vez que Olaf pierde su oportunidad de conseguir la fortuna de la familia Baudelaire, se le ve con un paso más por delante de los niños para conseguirlo.
En muchas maneras este Conde Olaf resulta también en un personaje que aprende de sus errores y que evoluciona ante los actos de los protagonistas, algo bastante superior al que el libro enseñó.
¿Pero qué hay de los hermanos? Bueno, la película nos vuelve a recordar la especialidad de cada uno para mantenernos despiertos y ver como salen de cada apuro que presentan, todas de una forma imaginativa e insensatamente posible. El único problema es que no hay muchas de esas escenas, y cuando pretenden mostrarnos en ellas el trabajo en equipo que demuestran tener unos hermanos tan unidos entre ellos, más te vale crear más escenas aparte de estas; que lo hacen, pero que no funcionan tanto, salvo cuando Snicket explica la definición de la palabra santuario, y que los Baudelaire crean durante su estancia en la casa de Olaf, esa sí que fue una bonita escena.
Y ya sabeis lo que comenté de tener al propio Lemony Snicket en la historia, básicamente también ayuda en este punto.




Respecto a los personajes, ya esa es otra cosa de la que hablar, empecemos con los Baudelaire.
Violet, Klaus y Sunny; conocemos sus especialidades, pero hay mucho más por decir de cada uno.
Violet por ejemplo es prácticamente MacGyver en una niña de 14 años, siempre buscando cualquier cosa que pueda reusarse para poder salir de los apuros que tienen.



A pesar de ser la mayor de todos, no hay muchas escenas en la que la veamos dirigir a sus hermanos, o con una naturaleza protectora sobre ellos, no sé si me explico.
Es solo que no hay mucho de hermana mayor en ella, en muchos momentos cuando toca ser fuertes tienden a compartir esa pantalla y acción con los hermanos, y en otras con solo ella al mando.
Creo que algo de ello tiene que ver con como han proyectado a Klaus, lo que también es otro tema aparte.
Aún así, creo que el personaje está bien, es solo que no hay mucho más que la distinga en esta trama; una cosa clara, esto no tiene nada que ver con Emily Browning, ella hizo un gran trabajo (Junto la voz de Michelle Jenner, que a mi juicio es la mejor dobladora de España), es más bien que su personaje no puede dividirse en más cosas conforme la historia avanzaba.

Klaus es interpretado notablemente por Liam Aiken; habría sido muy fácil que le hiciesen un molesto sabelotodo que constantemente remarca su inteligencia sobre todos los personajes; pero en vez de eso le hacen un personaje útil y agradable ante las situaciones que debe resolver con Violet y Sunny, y con el que nos centramos en observar el misterio que se nos presenta del incendio y el de la habitación de Ike, como también del ojo que parece estar en todos los muebles de la casa de Olaf.
Aiken hace un gran trabajo también mostrando su vulnerabilidad ante lo que ocurre, a pesar de que Klaus haya leído muchos libros, no muestra un comportamiento de superioridad; es más, si os fijáis detalladamente él no hace otra cosa que preguntar y pensar en algo que no tiene respuesta, como el por qué no avisan a las autoridades, o por qué sus padres nunca les contó nada de su pasado.
Momentos como estos te alegran que no siguieran el libro al pie de la letra, en la que los hermanos en realidad se ven muy deprimidos durante muchos capítulos; es una buena adición el cambio que dan a los personajes.



Sunny por otro lado es un personaje más elaborado de lo que muchos creen; aunque su especialidad sea morder como una ardilla encolerizada, también en la película la crean como un personaje muy gracioso con el tema de que sus hermanos comprenden perfectamente lo que quiere decir, pero que para los demás son solo balbuceos de una niña de 2 años.



También la hacen un personaje clave para muchas resoluciones, ya sea con la víbora en casa de Monty, el descubrimiento de la habitación de Ike, o del error garrafal de la tía Josephine.
Y sí, es muy divertido ver como Olaf la subestima siempre llamándola mono, para luego ver como Sunny más tarde le inca el diente para dejarlo en evidencia, o cuando apareció al volante de su coche para que el Sr. Poe vea lo incompetente que es el conde como su guardián (Eso fue realmente gracioso a decir verdad).
Sunny está interpretada creo que por las sobrinas gemelas del conocido actor Dustin Hoffman, quien aparece como de un crítico de teatro junto con Catherine O'Hara como Justicia Strauss (Adivinad su oficio...), quienes también entregan unas lineas graciosas e importantes puntos en la trama, pero que también forman parte del tema de ignorancia de los adultos ante los niños, de lo que hablaremos más en adelante.



En resumen, los huérfanos Baudelaire puede que no sean de primeras personajes MUY interesantes en comparación con otros, pero que con un poco de paciencia logran llegar a serlo conforme la misteriosa e inquietante trama avanza a su lado. Puede que Violet no tenga algo que lo separé de ser un personaje común, pero muchas de las lineas que da Emily Browning son preciosas, sobre todo la carta del final, es una actuación muy solida. Sunny es graciosa, y Klaus lleva las riendas de la historia ante el público, grandes actuaciones y actores. Continuemos.



Mientras, los personajes adultos como El Sr. Poe y el Alguacil son aquellos personajes a los que los Baudelaire tratan de explicar quien es Olaf, cuales son sus verdaderas intenciones  y que los intentan matar, pero que simplemente no les creen porque, bueno, son niños; huérfanos que acaban de pasar por una situación traumática y que necesitan descansar de ese suceso. Esto ayuda mucho a entender porque son tan ciegamente estúpidos en muchos momentos, pero en serio, ¿no pudieron distinguir a Olaf disfrazado de Stephano, o al misterioso médico que se parece al amigo del conde que lleva garfios en vez de manos? Quien lo diría, ningún adulto se salva de ser menos inteligente que la niña pequeña.



Creo que muchos de ellos caen en tener una actuación normal, pero la verdad es que me gusta mucho la interpretación de Timothy Spall quienes muchos le recordareis por ser Colagusano en Harry Potter y el Prisionero de Azkaban (2004).
En está película hace del Sr. Poe y es muy interesante verle implicado en todo este asunto y la amabilidad que brinda a los huérfanos, también es bastante divertido al lado de Jim Carrey, pero no hay mucho que destacar de él, simplemente es otro adulto que no puede creer a los niños y está demasiado ciego para poder tomarlos en serio.

Spall como el Sr. Poe y Cedric the Entertainer como el alguacil


Y sí, supongo que ya llegó la hora de hablar de Él, vamos a comenzar a hablar del Conde Olaf, interpretado por el supertalentoso comediante Jim Carrey.



Todos los que me conocen lo saben pero para los que no, lo diré sin tapujos: ¡ADORO A JIM CARREY!
Para mí era el actor más gracioso y que más me gustaba de mi infancia junto con Robin Williams, y muchas veces cuando mi padre y mis hermanos me preguntaban quién sería mejor de los dos, yo siempre respondía que eso es como juzgar a peras con manzanas, no es lo mismo.
Y en cierto modo estaba en lo cierto; ambos son excelentes comediantes con una gran actitud, pero Carry era más estrambótico que Williams, llegando a sobre-actuar en muchos de sus papeles de una manera muy enérgica y alocada que es imposible no reírse.
Ahora ya más adulto me gusta incluso más sabiendo que también ha sido capaz de hacer buen drama y buena comedia como en El Show de Truman; cierto que últimamente no ha estado muy en la onda, pero dadle tiempo y volveremos a verlo como en Mentiroso compulsivo (Donde me aprendí todas sus lineas de pequeño, para desgracia de mi madre).

ESTE GIF ES DE LOS MEJORES!!!

Su papel como el Conde Olaf es una de las cosas más difíciles de analizar, así que tenedme paciencia por favor, porque no va a ser sencillo.



Olaf en sí es el claro villano con dientes mal cuidados; el personaje es un actor bastante mediocre, ridículo y exagerado que tiende también a exagerar en el escenario y que es simplemente imperactivo y bochornoso en muchos aspectos, nada es sutil a primera vista.
Él quiere su fortuna y la quiere aunque tenga que ensuciarse las manos, como ya vimos cuando les dejó atrapados en el coche sobre las vías del tren.
Sorprendentemente hay muchas escenas de la oscuridad, seriedad y maldad que presenta; una de las que se me grabó a fuego en la cabeza cuando era más pequeño, es cuando disfrazado de Stephano en la casa de Monty está sentado en una mecedora con un cuchillo de caza, Violet asoma la cabeza para advertir a su tío de las intenciones de Olaf, pero ahí está Carrey volviendo a reflejar miedo, humor y seriedad en la escena.
Existen muchas inconsistencias alrededor de sus planes, como cuando obtiene la custodia de los niños y quiere matarlos para quedarse con su fortuna.
¿Es que soy el único que sabe que si un guardián tiene un niño bajo su cuidado, cosas como el dinero en este caso de los padres pasan a ser propiedad del banco?
¿O qué demonios tendría planeado después, no ha pensado que si lo juzgaban por negligencia descubrirían más tarde ese truculento pasado que quiere que Klaus deje de investigar?
TERCERO Y MÁS PREOCUPANTE ¿CÓMO ES QUE NADIE HA INVESTIGADO A ESTE HOMBRE ANTES DE ENTREGARLE A LOS NIÑOS?

A pesar de esas inconsistencias, me gusta ver a Olaf mejorar en sus planes, como si aprendiera de sus errores para no caer en ellos otra vez, demostrando también llegar a estar un paso por delante de los Baudelaire.



Vale, pero entonces os preguntareis cuál y cómo es la actuación de Carrey con este personaje, y en qué destaca en ella.
Chico, vaya si esa es la pregunta del millón; vale, hay muchas cosas buenas y algunas malas que no tienen que ver con Jim Carrey y su actuación, sino más bien con el foco con el que el director quiere llevar a Olaf a la pantalla a manos de Carrey.

Una cosa que todo el mundo reconoce es que Jim Carrey como el Conde Olaf es una imagen que todos saben reconocer; el trabajo que hicieron para que pudiese parecerse al aspecto del personaje es muy bueno, y su personalidad es muy parecida a la de Jim Carrey salvo por su aspecto amenazador y rastrero. Carrey en más de una ocasión ha dicho que intentó mezclar las famosas voces de Orson Welles Bela Lugosi, pero creo que también hay algo de Max Schreck o de Klaus Kinski a la hora de ser sutil y cuidando su forma en las sombras, en donde no es necesario comedia, como al principio de su presentación.



La forma de hablar, la ridiculez del personaje, su penosa actuación, e incluso su crueldad es llevada a la perfección; pero hay algo que no encaja, algo dice que no a todo esto.
Como cuando el director le dice que haga su famosa payasada de hacer de dinosaurio...



Yo vería cualquier película en la que Carrey hiciese bufonadas como las de esta película, pero lo malo es como las proyectan en ciertos momentos innecesarios en los que la trama se vuelve interesante, pero que el foco se ve distraído para ver a Jim Carrey haciendo lo que se le da mejor a su público.
Pero eso no es trabajo de la película permitir a Olaf exagerar ridículamente como el actor que lo interpreta, es que no funciona de este modo.



Lo que quiero decir es que por definición Olaf es un personaje sobre-exagerado y ridículo, como Jim Carrey, y aunque Carrey también consigue mantener el miedo y la crueldad del personaje, las escenas en donde el director le permite ser más libre con su humor, parecen asemejarse a un personaje animado, como cuando hizo de La Máscara o de El Grinch, lo que arrastra mucho del humor y rompe a veces la atmósfera de seriedad y misterio.
Creo que la escena del dinosaurio en la casa estaba muy bien situada, porque aún no se había establecido la seriedad y el peligro de Olaf, lo que recuerda a su personaje de Seuss, viendo como sin el traje le da ahora un mejor control de su cuerpo ante el público; pero una vez puesto en los momentos importantes, está fuera de tono totalmente y se convierte en algo que hace que la trama se distraiga.

Parte de los movimientos de Jim Carrey en esta película están más controlados al no estar atrapado en un traje muy molesto.

A pesar de todo, creo que Jim Carrey hizo un gran trabajo, es fenomenal verle una y otra vez como Olaf en pantalla, dejando siempre su marca de humor y misterio en muchos momentos, al igual que la imagen de un personaje que se ha grabado en la retina de muchos de los espectadores, al igual que en los lectores de Lemony Snicket.



¿Quereis oir algo extraño de Una serie de catastróficas desdichas? La película ganó el Oscar a Mejor Maquillaje por el trabajo que hicieron con Carrey y los distintos personajes que sería, como Stephano o el Capitan Sham, y dicho sea de paso, que Jim Carrey se afeitara la cabeza ayudó mucho a la hora de crear al personaje.
Es por esta razón, que la serie que ha lanzado Netflix para el 13 de enero de 2017 han decidido dejar el mismo tipo de imagen y maquillaje de la película para el siguiente actor que interpretará al Conde Olaf, no otro que Neil Patrick Harrys, un extraño casting, ¡pero hey! Creo que puede funcionar y llegar a rivalizar con el de la película después de todo.

NPH como Olaf, Malina Weissman como Violet, Louis Hynnes como Klaus, y Presley Smith como Sunny.

Pero me he ido por las ramas, lo extraño de todo este asunto es que fuesen nominados y llegaran a ganar el Oscar, lo que significa que esta película tiene mejor maquillaje que la mismísima película que recaudó más dinero de clasificación R o +18; así es, Jim Carrey dejó en fuera de juego a La Pasión de Cristo; debo de estar fumado porque no me lo puedo creer.


¿Podría alguien explicarme como un trabajo explícito de los dolores y las heridas que sufrió Jesús en su último día, es inferior a ojos de los Oscar?
O bueno, supongo que todo es posible en un mundo en el que un xenófobo, machista, racista, ladrón, mentiroso que se burla de reporteros que presentan discapacidades puede llegar a ser presidente.

Lo siento chicos, me he desviado del asunto, es que sigo aún muy cabreado...


Volviendo con Una serie de catastróficas desdichas, los huérfanos Baudelaire son enviados después con quien para mí es el mejor personaje de la película, su tío Monty, un herpetólogo muy amable que demuestra tener la misma conexión con los niños por lo que han pasado, y que resulta que puede que tenga las respuestas a todo lo que se están preguntando desde que sus padres murieron.
Bill Conty es fantástico como Monty, demostrando que la película no necesita arrastrar la depresión y oscuridad de los libros durante todo los escenarios.
Me encanta lo amable que es y lo implicado que se vuelve con su familia, parte de esto se debe a que Monty comparte con sus "sobrinos" (Creo... no sé) que también se quedó huérfano por culpa de un incendio; la perdida de su esposa y el alejamiento de su hijo no parece que hayan podido quitarle su optimismo, pero admite a su nueva familia que han aparecido en el momento que él más los necesitaba.



El optimismo de Monty les invita a su nueva familia a un viaje a Perú para alejar las vistas de los asesinos de sus padres; una vez más demuestran lo inteligente que es Monty respecto al asunto; lo que me repatea hasta el fondo para ver que no se dio cuenta de que Stephano era Olaf disfrazado.




A pesar de eso, Stephano es muy gracioso sin duda, es el foco del miedo y el humor en estas escenas, y como antes dije, la escena en la que esta en la mecedora es INCREIBLEMENTE aterradora y perfecta.
El humor está bien llevado, pero una vez más la película desvaloriza mucho la inteligencia del mejor personaje, al igual que Olaf a Sunny para detenerle de las suyas, aunque tarde.
Aquí una escena de prueba de lo gracioso que es Carrey y lo bobalicón que es Monty e ingenuo.



Siguiendo otro tema, va Snicket mostrándonos otro detalle bastante innovador y oscuro que abandona a Monty para pasar al Lago Lacrimógeno, en donde vive su nueva guardiana, tía Josephine, interpretada por la conocidísima Maryl Streep.
Ya acogidos en su nueva casa, Josephine demuestra ser un personaje con miedos y fobias ridículas de todo tipo, desde alejarse para que la nevera no se le caiga encima, hasta aterrarse por agentes inmobiliarios como Jane Lynch haciendo un cameo.



Para conectarse con los niños les enseña un álbum de recortes viejo, en la que se muestra a su antiguo marido Ike, con quien al parecer a su lado no temía a nada en esta vida.
Esto nos llama la atención para observar que la pérdida de Ike ha marcado su miedo y su inseguridad que antes no tenía.
Más tarde, Klaus observa una foto en la que sale con sus padres junto a Monty y un grupo de personas que llevan un catalejo misterioso que ya vio en un escritorio antes del incendio, levantándose así las sospechas de que cada guardián tiene una relación secreta con los incendios, o como es conocido en el libro, 
la V. D. F.
Quiero que os quedeis con el tema de la foto, no hablaré aún de ello, pero creo que guarda un tema muy importante que trazaremos con el final de la película.

Olaf vuelve a hacer su aparición ahora disfrazado como el Capitan Sham, y, ¿qué puedo decir? Es asombrosamente gracioso.
Algo raro de toda la escena es que la cámara no muestra un eje de sorpresa o miedo de parte de los niños al ver a Olaf ahora disfrazado, pero sí al ver a sus acompañantes del teatro Jennifer Coolidge y Jane Adams, como si tuviesen que tener miedo de ellas en vez de Olaf que acaba de irse con su nueva tía y la que potencialmente están en peligro.

Las escenas entre Carry y Streep son muy impresionantes y dedicadas la verdad, algo muy sorprendente de parte de los dos.
Jim Carrey se mantiene en ambos papeles como galán estúpido y más tarde como el ser despreciable que es Olaf, pero Maryl Streep, ¡Dios mío! Parece que nunca descansa de su personaje.
Las lineas, el ritmo, la pausa, las características, la voz, absolutamente todo lo lleva de una manera sencilla pero también teatral y profesional como es.
No quiero decir que este fue el papel de su vida o que incluso todo el mundo se quedará con su actuación, no, más bien trato de explicar que Meryl Streep por muy sencillo y ridículo que sea un personaje, presenta SIEMPRE una actuación bastante buena y trabajada de un modo único, su modo.
Para mí y mi hermana es una de las mejores actrices que existen por su comunicación, y aquí tenéis una película que técnicamente no la obligaría a realizar un esfuerzo por ello, pero lo hace, así que si llegáis a la parte en la que aparecen los Baudelaire en el Lago Lacrimógeno, os invito a analizar a su personaje para que veáis de lo que os hablo.

Una sorprendentemente gran combinación en sus actuaciones, que no tengo ni idea de como lo consiguieron, la verdad por delante.

El destino de Josephine es un poco más complicado de explicar; una vez más los chicos descubren que Olaf ha pretendido fingir su suicidio para poder hacerse a su cargo en nombre del Capitán, una resolución más inteligente que la del libro, es más, los guionistas hicieron un gran trabajo en cambiar la dinámica del clímax, ya que el final de El ventanal es prácticamente ridículo y difícil de seguir.
El caso es que la oscuridad y el hecho de que piensen de que su tía ha desaparecido de sus vidas es frío y legítimamente desolador, pero tristemente no siguen mucho con ello por la necesidad de dar la resolución del problema de la casa.
Una vez más el reto en el que combinan sus habilidades es muy ingenioso e interesante, probablemente el que más me gusta de la película.


Pero creo que falla en el momento en el que lo pusieron; una vez más Sunny entra en el cuarto prohibido de Ike para dar algo de luz al tema del misterio.
Violet, Klaus y Sunny descubren que Ike, Josephine, Monty y también sus padres, tenían una especie de grupo implicado en descubrir, o de buscar pistas a cerca de los incendios.
A pesar de no llegar a investigar más eso (¡Gracias trama!) Klaus recoge un único papel que desvela una ventana con un extraño ojo que tristemente, Josephine no cuenta nada sobre eso.
Descubren las pistas dejadas por Josephine, y más tarde la salvan de la cueva y de un chiste bastante gracioso, pero que puedes apostar que es sin duda estúpido.

Olaf muestra una vez más el villano que es en esta película, va aprendiendo de los niños e intenta estar un paso por delante de ellos, lográndolo completamente esta vez; verles partir mientras dejan a Josephine es algo bastante triste como cómico después de todo, pero que no pienso arruinarlo de todas formas.



Vamos a hablar del final, creo que tiene un importante valor que necesita que dejemos claro muchos de los motivos de la película, al igual que en esta adaptación el guión ha hecho un gran trabajo para poder cambiar los finales respectivos del libro, pero que también alteran otros detalles.
Viendo los puntos a hablar, sin duda tendrán spoilers, así que si estas interesado por ver Una serie de catastróficas desdichas te la recomiendo de ante mano, y después volver a esta sección para ver si compartes mi opinión o no.

Muy bien, continuando; Olaf "rescata" a los Baudelaire delante del alguacil y el Sr. Poe, lo que hacen que revalúen la decisión de dejarle a los niños.
Éste contento y sabiendo ahora que matarlos no hará que herede la fortuna de los Baudelaire, ha planificado un nuevo plan en el que los niños no podrán delatar sus intenciones... ¡Una obra de teatro!
Olaf pretende hacerles pensar al público que la obra consistirá en una boda entre su personaje y el de Violet, pero astutamente ha preparado el entorno para que sea legal ante todos; con Justicia Strauss haciendo de jueza sin saberlo y el consentimiento del tutor que es el propio Olaf, más atrapar a Sunny para acorralar la situación de Klaus y Violet, Olaf demuestra una vez más lo frío y retorcido que es.

Otra vez, Jim Carrey dedica a establecer el humor y la seriedad y villanía del Conde Olaf, pero aquí está extrañamente coordinado y equilibrado que los momentos de miedo son legítimamente horribles.
Olaf establece que no pueden culparle porque si cualquier persona tuviera intenciones y la misma situación que él, lo harían sin dudar; lo ve como algo natural y moral no ante sus ojos, sino ante lo que él dice que es que una persona que quiera "algo", el deseo humano.
En cierto modo, la idea es muy inteligente, y algo así pensado da más miedo que cualquier comportamiento loco o sobrenatural desde luego.
La mirada, los ojos, su voz, e incluso el maquillaje otorga a Carrey lo necesario para que su actuación pueda ser cómica como horripilante en un sentido liviano (Nunca llega a extremos como Hannibal Lecter, por decir un ejemplo).



Todo eso está muy bien, pero vamos a hablar de una cosa muy importante, lo que se me ha grabado siempre en la cabeza cuando pienso en Una serie de catastróficas desdichas, en Klaus diciendo "Las cosas nunca ocurren porque sí".
¿Por qué digo esto? Bueno, si recordáis al principio dije que el misterio y el como se desenvuelven los personajes es para mí el mayor foco de la película, acompañando el espectador a Klaus en cada escena que detalla o alude alguna pista de las conexiones entre sus parientes y el incendio.
Sí, la frase es algo que nunca olvide de niño porque recordaba tristeza y mucha verdad en cada palabra por la revelación que se mostró.
Como algunos sabréis, Klaus intenta salvar a Sunny de la torre prohibida del Conde, mientras la obra continua; Klaus observa que Sunny está encerrada en una habitación pequeña en el que parece estar el ojo dibujado del cuarto de Ike; mostrándonos así que en realidad el dibujo era un espejo que de forma proyectada a un punto fijo es capaz de hacer prender cualquier cosa cuando refleja la luz.
Klaus dice la conocida frase cuando se desvela que el espejo apuntaba en efecto a la mansión de los Baudelaire.
Debo admitir que la escena estaba muy bien hecha en muchos detalles, pero la reacción de Liam es muy poco aceptable.
Este debería ser el momento de ira de Klaus, el momento en el que por fin tiene la oportunidad de devolver a Olaf todo su enfado y rabia al que asesinó a sus padres y a sus tíos.
Pero se lo devuelve con esa mirada que es más de chulería que de satisfacción o venganza.



En fin, como muchos sabeis, Violet firma el acta de matrimonio que les reconoce como pareja; me gusta mucho el intento de que firmase con la mano izquierda, en señal de testigo de que está siendo obligada contra su voluntad y de que es nulo el certificado; en el libro esa es la forma en la que burlan a Olaf, pero una vez más, este ya sabia que sucedería y la obliga a firmar de nuevo con la diestra.
Klaus logra reflejar la luz al certificado y quemarlo, dejando expuesto al conde ante el público enfurecido por sus actos, y a Lemony Snicket contándonos el final del villano en una de las escenas más ridículas y menos triunfantes que he visto, pero graciosa eso sí.

Tan patetico y tan ridículo que simplemente es increíble.

A pesar de todo, mi mayor crítica a la película es que destruyen totalmente el misterio que los llevó a estos acontecimientos.
Pensadlo bien, todo lo que conocemos es que V. D. F. que ni siquiera tienen nombres aquí, se dedicaban solo a investigar los incendios; cierto que Monty dijo que perdió a sus padres en uno, pero la historia no entra en la profundidad de si fue uno accidental u ocasionado por alguien como Olaf.
Los catalejos como vemos son solo retratados como objetos de integrantes de ese grupo, y nada más, no tienen nada de especiales, como más tarde nos indica Snicket, son meramente objetos con una importancia al heredarlos, dejándonos la idea de que los Baudelaire intentarían contarles a sus hijos su extraño pasado para poder pasar la antorcha.


Entonces, no solo la película ata el misterio para que no quede ningún cabo suelto en la trama, sino que también reconoce de fondo otro para poder prolongar más la caída de esto.
Viendo ya el origen de los incendios y el deseo de Olaf de que dejen de investigarlo, solo nos queda preguntarnos quién es en realidad este hombre.
La película deja en el aire un poco su pasado, pero no sus motivos o el cómo llega ellos, lo que ayuda a alargar más la intriga.
Pero si mirais más de cerca la foto de Josephine, podréis observar que el mismísimo Jim Carrey aparece en ella sin su maquillaje; dejando así ante la mirada atenta del espectador que Olaf conoció en algún momento a los Baudelaire y a sus tíos.


Me gusta bastante ese detalle, sin bromear, creo que es uno de esos pocos aciertos que se mantienen con el espíritu del libro, detalles observables para el narrador y el lector, pero no para los personajes.
Sin embargo, esto no aclara el por qué Monty o Josephine no son capaces de reconocerlo.
Supongo que diríais que el tiempo le ha cambiado y su apariencia es distinta; ya, pero resulta que Olaf siempre fue Olaf no cambia de nombres ni nada por el estilo.

Supongo que el mayor crimen que ha hecho la película es cambiar la dinámica y la resolución del misterio, siendo la idea una contestación a todo, cuando debió de ser una respuesta que formulase más preguntas, algo que podría haber quedado con la curiosidad del público, y finalmente otorgarle futuras secuelas.

En caso de que queráis saber por qué Una serie de catastróficas desdichas no siguió extendiéndose como una saga, es básicamente que los productores querían nuevas ideas para continuar la proyección de forma animada, con Stop-motion y demás cosas, lo que les puso en un serio aprieto y no llegaron al final a nada bueno, rindiendo a no garantizar ninguna secuela ni un regreso a Jim Carrey como el Conde Olaf (Podría ser peor gente, como cuando cancelaron La Máscara II).



Al final de esta historia que ni siquiera el propio seudónimo del autor nos recomienda a escuchar o leer, ¿con qué nos quedamos?
Bueno, dire esto; Una serie de catastróficas desdichas es una de las pocas películas que brillan por sí mismas con sus escenarios, la cinematografía, una historia original e intrigante, y especiales personajes, al igual que actores e ideas.
Sus errores vuelven a hacerla un poco más común a películas que Jim Carrey ha participado, pero que se presenta como un trabajo de una obra que rinde homenaje a todas sus características.
Su oscuridad y retorcida linea, al igual que la figura del narrador que al final rompe la cuarta pared demostrando su implicación en la historia, la hace una película que no necesita seguir el libro en el que se basa u otras exitosas sagas más populares como Harry Potter.
Posee escenas y un buen ritmo ante el público, y sorprendentemente el final se ajusta a todo lo que cualquier espectador espera recibir en una sorprendente escena con uno de los mensajes más enternecedores de 2004; es realmente algo que vale la pena ver.


Es una película que toma forma de algo que tiene mucho potencial, pero que necesita más tiempo y concentración para mantenerse en la intriga y la desgracia, al igual que en las alegrías del Santuario que han creado los huérfanos Baudelaire.

Tal vez con suerte la serie que Netflix lanzará mantendrá lo bueno como mejorar lo malo que ha creado la película. Al menos eso diría con el trailer que mostraron con Patrick Warburton como Snicket, viéndolo más en detalle se ve que estará mas centrado en los libros y su depresión, pero también en la retórica y su humor negro.
Así que si no sois fans de los libros es muy poco probable que disfrutéis de la serie, pero espero equivocarme con esto.




Terminado y ya libre de Una serie de catastróficas desdichas, es hora de pasar pagina para preparar la siguiente crítica.
Espero que lo hayáis disfrutado, nos vemos.

viernes, 18 de noviembre de 2016

Doctor Strange (2016)



Marvel y Disney han retomado las riendas de este año con sus novedades más esperadas; el éxito que ha generado Capitán America: Civil War ha conseguido demostrar otra vez que las películas de superhéroes siguen siendo las más populares y entretenidas de este siglo.
Y es cierto, consiguen involucrarnos en distintos y variopintos argumentos de la misma manera que sus predecesores temas griegos se popularizaron en Grecia.
Continuando entonces, la otra película que cerraba este 2016 con un nuevo personaje uniéndose al Universo Cinematográfico de Marvel o MCU, es nada más y nada menos que el Doctor Strange.

De pequeño, cuando pensaba en los superhéroes de Marvel solo pensaba en Spiderman y Lobezno/Wolverine y sus compañeros los X-Men, pero debo admitir que conforme crecía y veía a gente involucrarse más en los cómics, Strange siempre me fascinó por completo.
Había algo en como hablaban de la posibilidad de la magia, los sueños, el mantra y el chakra que me mantenía interesado, al igual que sus aventuras y su deber de defender el mundo de esa magia.

Strange fue creado por Steve Ditko el mismo que ayudó a Stan Lee en la co-creación de Spider-Man.

Y cuando me enteré que el mismísimo Benedict Cumberbatch sería quien le interpretase, ya estaba completamente impaciente porque llegara el estreno y verle unirse con el resto al MCU.
Pero luego estuve pensando algo inquietante en la historia de la película; como muchos sabréis, el personaje guarda en parte cierta relación con otro personaje de Marvel, Thor, no solo en cierto modo a los mundos apartados en los que ambos residen, sino también desde un punto de vista argumental el tema de magia y los dioses nórdicos no se alejaba de lo que trataban de hacer con Thor (2009y Thor: El Mundo Oscuro (2013), películas que demostraron que llevar al cine la historia del dios nórdico sería más complicado que el poder reunir a Los Vengadores una vez más, o incluso a los Guardianes de la galaxia para competir con nuestros héroes de la Tierra.

Por suerte, mis dudas al igual que las de todo el mundo y los fans más devotos fueron silenciadas al ver la película, y no solo es muy buena, no solo está bien escrita, sino que puede que sea la mejor película que hayan hecho de momento en Marvel Studios (ok exagero un poco).
Puede que esté exagerando, o puede que no, en cualquier caso vamos a empezar desde el principio; esto es la historia de Doctor Strange:

Stephen Strange (Benedict Cumberbatch) es probablemente el mejor médico de Nueva York (Neurocirujano para ser exactos), o incluso del mundo, lo que logra con sus manos no es solo salvar vidas para él, sino también una serie de retos o juegos que muestran un comportamiento un tanto ególatra, pero muy profesional ante sus colegas y su mejor amiga/ ex-novia Christine Palmer (Rachel McAdams).
Después del trágico accidente de coche que Strange ha sufrido, parte de su cuerpo ha quedado destrozado, pero mientras se estaba recuperando ha dado muestras de que sus manos no estaban mejorando en ningún aspecto, dejándolas inservibles para trabajar o incluso escribir.
A pesar de todos los tratamientos existentes, Strange descubre que la cura se encuentra escondida en un rincón del mundo, invisible para muchos y difícil de hallar.
Así, el protagonista es encontrado por Mordo (Chiwetel Ejiofor) y La Anciana (Tilda Swinton); quienes se compadecen de Strange y deciden abrirles las puertas al conocimiento de las Artes Místicas para poder reparar su dolor. Aunque escéptico del rollo espiritual y místico del ambiente, Strange da muestras de aplicarse seriamente para conseguir su propósito; lamentando mucho así La Anciana, que su mejoría en las artes la obliguen a pedirle ayuda contra la insurgencia de Kaecilius (Mads Mikkelsen) y su grupo para detener un mal antiguo al que la Tierra aún no se ha enfrentado.


¡Ay madre mía de verdad XD! No sé ni por donde empezar en serio, esta ha sido una de esas pocas películas que son capaces de cumplir todas las expectativas y explorar temas de una forma que el público se sienta involucrado e incluso sienta deseos de aprender ya sea medicina, el cuerpo humano o incluso parte del mundo incorpóreo, místico o espiritual.
Muy bien, vamos a hablar de por qué Doctor Strange funciona respecto a su historia argumental al igual que cómo sitúa parte de ese mundo en el cine.

La película inteligentemente comienza con una breve escena en la que Kaecilius roba la página del libro prohibido para empezar la cuenta atrás para su plan, siendo parte de esa escena una perfecta muestra de la magia y las artes que tratan de conectar con el público, mientras vemos con unos perfectos y trabajados planos hechos por CGI que parte de ese mundo se desenvuelve.
Una vez terminada la escena, entramos con Strange en una sala de operación mientras escucha música, y hasta que tenga la oportunidad de conectar con ese lado mágico escondido del mundo, el ambiente  conecta con nuestro día a día, siendo una de las pocas películas de superhéroes que logran crear este entorno.



El aire de seriedad que exploran en el hospital al igual que cuando se encuentra con el sentido del humor del personaje de Strange, son siempre bienvenidos y hechos muy cuidadosamente para poder avanzar sin problemas con la historia.
Pero ya una vez que vemos a Strange desesperado por curar sus manos, en frente de La Anciana para aprender su instrucción en las Artes Místicas comprendemos 2 cosas muy importantes que remarcan la función de la historia. Al principio y no explorándolo detalladamente, el hospital de Strange reparte muy bien en cada escena la funcionalidad tecnológica con la medicina y el cómo ellos se aventajan de ella para poder tratar y comprender el cuerpo humano.
Sabiendo esto, Strange y nosotros como público esperamos ver qué tendrá que ver la magia y los cuentos de chamanes ante la complicación y la funcionalidad del cuerpo humano.

Bien amigos, una vez que llegamos al punto de La Anciana, ella nos muestra durante su monólogo que en la vida no podemos controlar el cuerpo, pero que existe un momento en el que cuando llegamos a un límite físico estamos dispuestos a observar un área muy nublada que nunca encontramos, otra realidad de muchas, parte de ello está relacionado con la voluntad de la que nosotros cargamos para hacer frente a cualquier reto, ya sea incluso jugándonos la vida; es en ese momento en que estamos abiertos a un aire espiritual que separa nuestro límite físico ya sea mental o corporal, para mostrarnos ante las Artes Místicas.

Nadie tiene un control total en su cuerpo, así que, quién diría que reconociéndolo puedes estar abierto ante unos de los más grandes cambios que existen.


Bueno, si la historia tiene la oportunidad de trabajar en 2 mundos distintos para poder contar una historia que se desenvuelve en ambas, ¿cómo se manejará en adaptarlo de la versión del cómic al cine?
Debo admitir que a veces no cuentan con mucha explicación porque es magia a veces, y no solo un modo de vida en el que estos protectores del mundo se centran y practican.
Por ejemplo, durante una de las peleas contra Kaecilius pretenden enfrentarse a él en la Dimensión de Cristal, una dimensión capaz de alterar las estructuras y los escenarios para poder acorralar al villano y sus artes, y al mismo tiempo proteger la nuestra, pero más en adelante explican que fue un error debido a que la Dimensión Oscura que conecta con Kaecilius le hace más fuerte en la de cristal.
No existe una explicación que haya visto la verdad, pero salvo eso, muchas otras cosas tratan de conectarse con objetos y temas de fe contra la negación del mundo, lo que no está nada mal y eso permite no tener que explicar el por qué del lado mágico de ese mundo en el cine.
En cierto modo, funciona como un gran anticipo al desarrollarlo y de una forma que sin duda convertirá a muchos del público en fans y seguidores del Doctor Strange.



Bien, antes de ahondar en las actuaciones, las escenas de acción y los villanos, vamos hablar de la parte técnica de esta película.
La verdad es que en muchos momentos sigue siendo una película bastante centrada, nada de agitar la cámara o pobres transiciones la verdad.
Pero con el detalle con el que todo el público se queda es la alteración de la realidad en la Dimensión de cristal, y sí gente, es FANTÁSTICO, el CGI es manejado en la pantalla con mucho cuidado y las posibilidades que crea son infinitas en todos los sentidos.



Debo de admitir que me gusta que lo expresen como un cuadro de M.C. Escher para poder dividir el entorno a los espectadores.
Si tuviera que escoger una escena de toda la película que explora este alucinante mundo, sería cuando La Anciana le muestra a Strange el multiverso, al igual de que el límite físico es solo una pequeña parte de la que el universo está compuesto. Brutal, perfecta y los colores que exploran la mente del doctor van más allá de hacer un buen trabajo (Imagino que así también fue la revelación de Roland en El Pistolero de Stephen King).
Es una de esas veces en el cine en que la experiencia visual, al igual que el monólogo de La Anciana es capaz de hacerte cuestionar sobre lo metafísico y el arte espiritual.



Muchas de las tomas aprovechan bastantes trucos cuando los personajes intentan crear hechizos, siendo muy creativas con el acercamiento y el movimiento la verdad. Convirtiéndose en una de las pocas películas que tratan de aprovechar la fotografía y la cámara con la personalidad del superhéroe, como en la saga de Spiderman de Sam Raimi.

La música es sorprendentemente muy buena; en ciertos momentos llega el tema principal The Master of the Mystic a parecerse al tema principal de la serie de la BBC Sherlock, en la que Cumberbatch aparece como el detective, pero en el fondo es tan solo un guiño para los fans de el actor. Es Michael Giacchino quien se pone en la posición de compositor, y realmente hace un gran trabajo con la música a la hora de ayudar a conectar con los momentos espirituales, cómicos, o incluso cuando la acción lo requiere.
No hace falte que toméis mi palabra, sentaos y relajaos escuchando el tema principal mientras seguís leyendo mi análisis.



Es hora de empezar ya con el tema candente; terminados los puntos técnicos al igual que la proyección de la historia, vamos a hablar del punto más importante de Doctor Strange, los personajes, comenzando con el mismo Doctor:

La Anciana abriendo la mente de Strange hasta el límite de su percepción de la realidad.

Creo que Benedict Cumberbatch es uno de los mejores actores que existen actualmente, en serio, pienso que la popularidad que se le ha reconocido por fin ha empezado a demostrar de lo que es capaz, en mi opinión puede incluso rivalizar contra el propio Gary Oldman.
Su actuación como Stephen Strange creo que aunque no es complicada de crear, en ciertos momentos es difícil de seguir.
No me malentendais, creo que Cumberbatch sigue siendo una brillante elección para el papel debido a las semejanzas que tiene con el personaje, al igual que es capaz de actuar para que Strange sea una extensión de él, más el personaje, junto con una evolución por su actuación.
Maneja muy bien su actitud ególatra al igual que su implicación y deseos de aprender más en el arte astral como de repartir una actitud profunda y sincera o cómica en los momentos en los que la película necesita un descanso de la acción y el clímax.


Una de las actuaciones más sorprendentes son cuando Strange trata de defenderse en un combate contra un aprendiz de Kaecilius, éste acaba muriendo y Strange quien antes fue médico, no desea estar implicado en derramar sangre a pesar de que lo necesiten para defender el mundo.
Pero si yo tengo que quedarme con una escena, es cuando toma su espíritu astral para hablar con un personaje que se está muriendo poco a poco.
Ahí se presentan unos sólidos 3 minutos de conversación sobre lo que significa el paso de la muerte en una actuación sobresaliente, en serio; no solo se plantea en un guión que lo trata con un respeto y una forma de tema que nunca había visto antes, sino que ademas de eso endereza las actuaciones en un nivel que eleva la película en algo más profundo de valorar.
No desentona en ningún momento, sólo nos abre la posibilidad de muchos más temas que esperamos que Strange vuelva a mostrarnos con la misma seriedad que hemos visto.
En cualquier caso Benedict Cumberbatch lleva a la pantalla al personaje del Doctor Strange en una gran actuación que aunque a veces parece semejarse a la de Sherlock Holmes, reparte menos frialdad, más contacto con los personajes como Christine, y eleva mucho el tema espiritual y metafísico de la historia, al igual que el cómico en una actuación que los fans del MCU no olvidarán, al igual que los fans del propio personaje.


Rachel McAdams interpreta a la antigua novia y mejor amiga de Strange, Christine, otra doctora que trabaja con él en el hospital.
Muchos pensareis que Christine vuelve de nuevo a ser un personaje que se centra en ser simplemente el interés romántico de la película, y que solo se encuentra en el centro de la historia como un apoyo para el protagonista en su momento más bajo.
Bueno, no solo Christine barre todo eso, sino que ademas perfecciona el personaje en distintos giros, entre ellos al ser médico, salvar la vida de un personaje.


Creo que Rachel McAdams hizo un buen trabajo, es cierto que en ciertas ocasiones su personaje reparte ciertas inconsistencias a la historia, como cuando nos resaltan que Strange pese a tener dinero para sus tratamientos está casi en quiebra ahora.
Cosas así son detalles sueltos y deliberados con los que tiene que cargar un personaje con un tiempo bastante limitado. Aunque debo decir que me gusta mucho la idea que tuvieron los guionistas con Christine y el rumbo con el que la querían dirigir, pese también a ser el personaje de Night Nurse como ya hizo Rosario Dawson..
Es cierto que antes eran una pareja, pero a pesar de haber roto, nunca se les ven juntos de nuevo, en cierta forma Strange tiene una relación con ella de amistad bastante fuerte y unido, dejando claro que a pesar de las distancias o las complicaciones, siempre se tienen el uno al otro en una forma que no los implican en un romance.
Esto es algo que me parece más creíble que cualquier romance la verdad, siento con ellos que puedo situarme e identificarme en las mismas situaciones por el hecho de que yo también he pasado por una relación que actualmente veo más agradable y centrada en una relación amistosa.
La confianza que se tienen entre ellos y las deliberadas lineas dramáticas como cómicas, elevan la actuación de Rachel como el del personaje de Christine a otra faceta que el MCU aún le quedaba por mostrar en la pantalla; y en mi opinión con resultados muy interesantes y nada comunes.


Otros personajes como Mordo son vistos bajo otra perspectiva para el público.
Mordo es por lo visto un personaje muy importante en futuros acontecimientos del MCU, lo que explicaría su poca presencia en pantalla y durante la trama. Pero creo que debo de juzgar al personaje y a su actor por lo que son, y no lo que tratarán de ser en futuras entregas.



Chiwetwel Ejiofor ofrece una actuación estándar; está OK generalmente y parte de su interpretación no se aleja de lo que debería de ser el compañero del protagonista en esta película.
Mordo comparte con el público el sentimiento que tiene con la situación de Strange, de alguna forma trata de decir que él pasó por lo mismo y que le recuerda mucho a cuando encontró a La Anciana por primera vez.
A pesar de dejar claro esos puntos, no entran mucho en su pasado, simplemente se establece esa relación con Strange por medio de una deliberada frase en la que mostraba una inflexión de humor en vez de contacto o seriedad.
Con eso dicho, no quiere decir que Chiwetwel hiciese una mala actuación, nada de eso, es solo que en ciertos momentos su presencia se ve apagada durante la segunda parte; muchas lineas memorables las dice Mordo, y me encanta que reconozca que Strange tiene un talento para las Artes Místicas al igual que como respeta a La Anciana.

Sin embargo existe un momento en el que el personaje moralmente está destrozado por algo que ha descubierto, viendo que en todo lo que creía y protegía no era exactamente lo que él conocía, resultando en una caída completa de su mundo. ¿Cómo fue la actuación ante semejante concepto?
Solo una discusión, grita, se enfada y se va por su cuenta a Dios sabe dónde...

No sé de quién exactamente es la culpa, si del actor, el guión, el montaje, la cámara, el director; podrían ser todos.
Aquí había una oportunidad que se les ha escapado de entre los dedos, lo que es un poco triste teniendo en cuenta lo innovadores y serios que han estado durante el resto de la película.
Tenían la oportunidad de hacer una escena de rotura moral al nivel de Frodo en El Señor de los Anillos, y lo único en lo que se enfocaron fue en adelantar el final post-créditos.

A pesar de eso, Mordo es un buen personaje en la historia, pero que no llega a establecer nada especial para hacerse distinguir; sus lineas son bastante buenas al igual que las cómicas (Pensé que no me haría gracia lo de Shamana, pero me reí a gusto del todo).
Ya veremos en que derivará en el futuro del MCU.

Ya que hablamos del humor de la película, os contaré brevemente mi opinión.
Aunque no sea una comedia o algo así, la película sorprendentemente tiene un buen sentido del humor que lo entrega de formas bastante creativas; en muchos momentos es lo conocido, una linea graciosa en la que se ve como reacciona otro personaje ante lo dicho.
Pero mayormente se tratan de chistes, reacciones o incluso hechizos que simplemente destacan por lo graciosas que son y lo inteligentes que las muestran, especialmente con el personaje de Wong, interpretado por Benedict Wong.
Sin equivocarme os digo que también su humor es una de muchas razones para ir a verla, totalmente en serio.

Es más, una de las formas de entregar humor es a través de quien parece ser el mejor personaje de Doctor Strange, la Capa de levitación.
Yo no tenia ni idea de que la capa tuviese vida, ¡pero hey! Es original, y al igual que la mayoría del público y los fans pensaron, es realmente graciosa.
En cierto modo me recuerda mucho a la Alfombra de la película de Disney Aladdin (1992); se mueven de la misma manera y el beneficio de hacerla por CGI ofrece las mismas ventajas que el de animarlo.

Tan solo mirarlo y ya me vienen los buenos momentos XD

Alejándonos de personajes de relleno o insustanciales, llega la mayor maestra de las Artes Místicas, La Anciana, interpretada por la increíble y talentosa actriz Tilda Swinton.



Quizás os suene más la actriz por haber sido Jadis o La Bruja Blanca en Las Crónicas de Narnia: El León, la Bruja, y el Armario (2005).
En cierta postura su personaje aquí no se diferencia mucho del de la bruja; ambos son seres de edad desconocida que de alguna manera se especializan en un arte mágico con el cual pretenden cumplir objetivos opuestos. Tienen misteriosos orígenes que nos hacen dudar de su moral y motivación, etc.
La Anciana en este caso resulta en un personaje antiguo y muy espiritual, pero abierto/a ha acoger a Strange para ayudarlo a ver el límite metafísico y el físico del hombre.
No cae en ser el típico maestro como Merlin o el señor Miyagi, ya que realmente se siente ese mensaje espiritual y humano al mismo tiempo, junto con la importancia y responsabilidad que tiene en ese mundo.
Tilda Swinton ofrece una actuación IMPRESIONANTE, y lo digo de verdad; no solo se mantiene en ser este ser humano del que posee un sexo y carácter ambiguo, pero también llega a compartir diálogos y lineas muy profundas y serias.
Existe una escena en la que habla muy breve sobre la fascinación que tiene al ver la nieve en el monte Everest, nada especial la primera vez, pero más tarde vuelve a retomar brillantemente el tema en su imagen astral para enseñarle a su aprendiz los pasos de lo que se puede aprender de la Vida y la Muerte cuando se tienen en cuenta la especialidad y la magia que poseen.
Capta completamente la belleza de porque la gente se relaciona con el mundo espiritual y porque es un consuelo seguir implicado en ello para mejorarse uno día a día; es la definición de algo perfecto en una película.



No creo que sea su mejor actuación, nada de eso; es solo que entrega tanto a un personaje que jamás habría funcionado de una forma novedosa e interesante de no ser por Tilda Swinton.
La forma en cómo se expresa y gesticula sus movimientos como maestra es única, lo que nos da a entender que también la actriz va a ser metódica durante el rodaje y su forma de presentarse al público, lo que le otorga otra imagen de control ante la historia, especialmente si resulta en ser un personaje importante.
Creo que lo más cercano a lo que quiero decir es cuando habla con Strange por primera vez o durante sus entrenamientos, al igual que su forma de combatir con su antiguo aprendiz Kaecilius, demostrando ese control durante los primeros minutos al abrir los portales de una forma bastante distinta que como lo hacen los demás personajes.



Si muchos habéis estado atentos a las noticias que han dado de la película, sabréis que se ha montado un escándalo por la elección de escoger a Swinton para el personaje de un hombre.
Creo que es importante que comente este detalle para poder dejar claro esto; veréis,  el encubrimiento racial es algo que ha estado muy presente en Hollywood, llegando el propio público y fans de Doctor Strange a pensar que la razón de que hayan cambiado los orígenes de un sabio monje tibetano por el de una mujer céltica, es por un serio tema racial.



Teniendo este pensamiento en mente, el público en general ha atacado a los productores por la elección de Tilda Swinton, reprochándoles que sus motivos del cambio son en efecto un caso de encubrimiento racial.
Vale, escuchando esta historia sé que algunas piezas encajan para pensar en ese posible cambio para poner a una talentosa actriz en vez de a un don nadie tibetano; pero la realidad es otra.
Me explicaré, resulta que un 18%-20% de los ingresos en taquilla que Marvel Studios ha recibido durante estos años han sido del público de China, y como sabréis, China y el Tíbet han tenido una historia y unas relaciones MUY complicadas.
Sabiendo esto, los productores al igual que los guionistas y el propio director, decidieron cambiar los orígenes de La Anciana con la intención de no provocar ningún problema.
Por un lado se siente en parte relajado saber que no tienen nada en contra con el Tíbet y que nadie es técnicamente anti-tibetano; pero mirando también el lado más oscuro del asunto, este cambio se ha producido para poder llegar comercialmente sin problemas a China.
Así es, al final todo se reduce al dinero.

Si os sentis interesados por cómo se ha producido este encubrimiento racial en el cine, podéis mirar este interesante editorial de Doug Walker en el que explica en qué consiste este "White washing"; sin duda vale la pena aprender de esto:



Y así llegamos a la parte final del análisis, el villano Kaecilius interpretado por el popular actor Mads Mikkelsen.
Cada vez que se habla de un villano en las películas de Marvel siempre se tiende a menospreciarlos porque no comparten el magnetismo y el carácter que Tom Hiddleston creó con Loki, de modo que personajes como Ultron, Ronan, Craneo Rojo o Malekith nunca dejan una buena impresión ante el público. Respecto a Kaecilius, es posible de que muchas personas vuelvan a pasar a este villano por alto, pero por mi parte creo que es un error ignorarle durante el resto de la historia.
Creo que los motivos al igual que el personaje en sí son bastante interesantes, sí, incluso más que Loki en cierto modo. ¿Creéis que exagero verdad? Bueno, antes que nada vamos a repasar las motivaciones del personaje, al igual que la actuación de Mikkelsen.


Kaecilius fue en otro tiempo un aprendiz de La Anciana al que se le entrenó en las Artes Místicas para poder superar su situación de tristeza y destrozo tras perder a su familia (Una vez más el pasado de un personaje no se proyecta de otra manera que en un diálogo, menuda oportunidad más perdida...).
Como vemos al principio de la película, Kaecilius, seguido por sus seguidores, roban de la biblioteca un hechizo con el que amenazan la seguridad de La Anciana al igual que del mundo.
¿Su objetivo? Bueno, durante la película han hablado mucho de superar los límites físicos y espirituales para llegar a un punto de mejoría misma, declarándonos que La Anciana, Strange, Mordo, Wong, o incluso Kaecilius se sitúan en un punto de consciencia del cuerpo a un nivel general y místico. Aquí es cuando la película empieza a brillar, veréis, nuestro villano muestra al protagonista como al público que parte de ese control es incompleto; siendo monjes que aspiran a ese punto, La Anciana muestra un aire muy sospechoso de longevidad que de alguna manera no presentan los demás maestros o aprendices.

En cierta manera, Kaecilius tiene un motivo para sentirse engañado, siendo siempre el objetivo de los hechiceros controlar las Artes al igual que evolucionar el cuerpo en beneficio, ¿por qué se les niega la inmortalidad a ellos? ¿Por qué se les aparta ese conocimiento en un libro prohibido si el único deber que conocen es el de proteger el mundo sin ningún afán egoísta?
Bueno, antes que nada voy a rebatir porqué este punto de la trama está tan bien escrito.

Veréis, yo he sido, y me considero aún una persona espiritual, me he criado con gente que lo ha sido y he viajado bastante para conectarme con personas que conocen otras que se han mantenido estrechas a esos lazos; en mis viajes a EEUU he  leído sobre las ideas de los nativos americanos que nos mostraron la vida bajo las estrellas y el origen de los espíritus guía, y en 2 ocasiones he aprendido durante el verano la importante cuestión del Budismo,  y como funciona lo de abrir mis chakras con un compañero.
Así que en cierto modo podéis entender mi conexión también con el misticismo de la película, pero ¿cuál es la razón de que crea en la perfección del cuerpo ante el arte astral y la meditación?
Os explico; estudiando una carrera y viviendo con médicos y científicos, he descubierto que se ha probado que mucha gente que se ha mantenido ante un ambiente espiritual o de energía como los monjes tibetanos o los guerreros Shaolin, el agua en su sangre es sorprendentemente más concentrada y evolucionada (Este descubrimiento más tarde inspiraría a George Lucas con la teoría de los midiclorianos), a pesar de ser una investigación muy rebuscada, esto argumenta la base de Kaecilius de que efectivamente, ellos mejoran en pos de llegar a un mejor estado.



Mads Mikkelsen no es Tom Hiddleston para empezar, su actuación para mí es adecuada y necesaria; puede que no tenga el mismo carisma de Loki, puede que no grite sus lineas de una forma megalómana y ególatra que él, pero se trata de mantener a un villano a un nivel que la trama lo necesite para lo que es, para manipular la mente del público y para que podamos entender sus motivos.
Mads se ha hecho muy popular recientemente por interpretar a Le Chiffre en Casino Royale (2006) y al doctor Hannibal Lecter en la serie Hannibal, en la que en ambos papeles los lleva de una manera brillante y magnética.
Su personaje se aleja de destacar en ser como en sus 2 papeles más populares, pero tan solo con la intención de mejorar la historia, la forma en cómo revela la verdadera naturaleza de su antigua maestra es un momento de confusión, engaño y venganza que arrastra al público y a los personajes a un indescansable y acelerado final con giros perfectamente realizados.
Las escenas de acción son muy buenas en cierta parte, el CGI realmente hace que los hechizos destaquen de forma única, y su relación con la dimensión cristal provoca que experimente infinitas posibilidades que realmente valen la pena de ver.



En resumen, Kaecilius es un personaje que no pienso que destaque por su carácter o su aspecto, o cuan divertido o gracioso o malvado sea, sino en parte por sus motivos y su forma de ver la realidad de ese mundo que le obliga a mejorar y traspasar su límite físico, y que encima las bases de las que creía confiar le engañan egoístamente para negarle el punto más alto, la inmortalidad.
En cierto modo, es muy entendible sus puntos de vista y los motivos que le empujan a robar la página del libro, viendo anteriormente que su parecido con Strange nos hace plantearnos cómo de diferentes son cada uno. Es solo que los métodos que Kaecilius emplea para llegar a ser inmortal son inquisitivamente peligrosos y asesinos, llevándonos a ver como mata a sus antiguos hermanos del templo, como se relaciona con la peligrosa Dimensión oscura para poder liberar al mayor enemigo de La Tierra y La Anciana, Dormammu (Benedict Cumberbatch) para llegar así tener vida eterna.



Poniendo fin a la crítica, vamos hablar del final; tranquilos, no haré ningún spoiler de nada, pero para aquellos que lo han visto saben de lo que hablo, así que vamos al asunto.
Cuando el clímax llega al punto en el que Strange se da cuenta de la solución para evitar el regreso de Dormammu, empecé a notar que la cámara y la fotografía que habían estado manteniendo Ben Davis cambió de repente a un zoom mantenido muy propio de las otra películas de Marvel, como Los Vengadores y otras.
Sabia que iba a pasar algo raro, porque de pasar a crear planos y secuencias novedosas e innovadoras a repetir las costumbres de otros proyectos a las que los fans ya estaban acostumbrados se veía como un paso hacia atrás del que me temía por un momento.

Pero al final vaya sorpresa que me dieron, el director y el montaje solo estaban adelantando la tensión y el humor del encuentro con Dormammu en una escena que a mi parecer no solo fue brillantemente e ingeniosamente escrita, sino también uno de los mejores y originales finales que he visto en este 2016, puede que incluso el más original de este año.
De alguna manera ponen en mente al espectador la ventaja que tiene Strange con el Ojo de Agamotto durante la confrontación, dejándonos ver la innovación y la dureza y el humor del final; Strange se ve obligado a tener que hacer un trato en el que su orgullo debe ser atacado y humillado en una perfecta escena en la que supera ese dolor, llevándonos también a una de las escenas más graciosas que Marvel Studios jamas haya hecho.



El ritmo, la tensión, y el concepto del escenario es más que satisfactorio, es ingenioso y brillante, pero la verdadera razón de que me guste es por otra.
Vereis, cuando estas relacionado con libros o sagas, o incluso películas como Harry Potter, El Señor de los Anillos, la mitología griega, historia, Kingdom Hearts, Final Fantasy, vampiros, licántropos, héroes de guerra, Piratas del Caribe, Patton, Star Wars, El hombre bicentenario, El retrato de Dorian Gray, y muchas otras referencias que se os podrían ocurrir, siempre vuelve ese tema tan insistente que es el vivir para siempre.

Muchas veces hablan de lo bueno que es al principio para luego acabarlo con la enseñanza de que la inmortalidad cuesta también ver al mundo envejecer y avanzar sin ti, viendo como tus seres queridos desaparecen mientras que tú aún puedes ver al sol alzarse otra vez cada mañana.
Debo de admitir que cada una tiende a generar una buena respuesta y una enseñanza de como la idea de no envejecer o morir es ridículo, algunas más convincentes que otras, pero tienden siempre a chocar con el mismo argumento, es solo el cómo lo aceptan los personajes en cada historia como lo modifican.

Arwen en El Señor de los Anillos eligió tener una vida mortal para poder estar con el amor de su vida, Aragorn, sin embargo, su longevidad solo será interrumpida por la tristeza de su soledad, teniendo que ver como sus seres querido desaparecen; totalmente triste.

Bueno, sabiendo esto os digo sin exagerar que por primera vez Doctor Strange vuelve a innovar y adelantarse al resto del mundo con el tema de la búsqueda de la inmortalidad.
Sabiendo los motivos que escribí anteriormente sobre Kaecilius, debéis de admitir que la película tenia un reto bastante grande para hacer ver la equivocación del personaje respecto al deseo; es decir, podemos verlo como algo negativo al ver el riesgo que ha supuesto al mundo en esta historia, pero apartándonos de eso no existía ninguna razón de hacer rendir al villano a cumplir ese objetivo.
Una vez más, los guionistas crearon un giro espectacular que nadie jamas había escrito o puesto en un libro o en una película (Al menos que yo sepa, pero sí, tampoco ningún filosofo ha llegado a citar este pensamiento) creando una brillante razón/cuestión sobre como la búsqueda de la inmortalidad será siempre algo en vano, y todo gracias a La Anciana y a un guión perspicaz del que daré crédito a sus guionistas Scott Derrickson, C. Robert Cargill, y Jon Spaihts.

Benedict consultando con el director y guionista Scott Derrickson

Así ponemos fin al análisis de Doctor Strange, una película que explora el mundo místico y mágico del popular personaje de cómic, en el que la historia es atrayente, presenta personajes agradables e innovadores escenas sacadas de Origen/Inception que emplean de una forma creativa y que llegarán a complacer a todo el público.
Es simplemente una de esas películas que tienes que ver si quieres pasar un buen rato, y por supuesto, para ver al increíble Benedict Cumberbatch actuar de la única forma que sabe hacerlo, impresionantemente.
Si tenéis intención de verla, creo que esta es una de las pocas películas en las que verla en 3-D o IMAX puede resultar en un beneficio, no será dinero perdido para ser sincero.
En fin, de ahora en adelante estaré un poco menos activo para poder subir dos entradas muy especiales para el blog, una antes de diciembre y la otra antes de Navidad, con que si tenéis alguna sugerencia acerca de alguna película navideña que os interese que os hable, no os cortéis y por favor dejadla abajo en los comentarios.

¡Nos vemos en la próxima entrada!

Twilight Zone: The Movie (1983)

"You're traveling through another dimension, a dimension not only of sight and sound but of mind. A journey into a wondr...